Sinagoga de San Antonio Abad

POR VÍCTOR GUÍU AGUILAR

La importante comunidad judía de Híjar, como ocurría en el resto del país, se tuvo que servir de la realidad constructiva de la época; el estilo mudéjar.
Este estilo se impuso en nuestra localidad con el Señor de Híjar como mecenas; el cual lo impulsó extraordinariamente: Iglesia de Santa María la Mayor, iglesia de San Blas, varias ermitas y la fisonomía urbanística en general.

Existe un documento de 1410 en el que se recoge la reconstrucción de la Sinagoga. La obra mudéjar pues, se ejecutó siguiendo la manobra (obra) tradicional aragonesa: esta se compone de un aparejo de rejola (ladrillo) a soga y tizón, enlucido en algez (yeso), y obra de fustería (madera) en la tribuna o coro alto y techumbre.

La Sinagoga hijarana, en su forma presenta una amplia planta rectangular. Destaca de su construcción el sistema de cubierta, con vertiente a dos aguas, apoyada en arcos diafragma apuntados. Este sistema es típicamente aragonés, y tiene su mejor expresión en la ermita de la Virgen de la Fuente en Peñarroya de Tastavíns; aunque existe también en Híjar un ejemplo semejante que se encuentra en ruinas, la ermita de San Miguel, realizada en tapial y que presenta la misma cubierta.


La entrada a la Sinagoga tiene entrada por la plaza de San Antón, a través de una puerta en arco apuntado, flanqueada por dos contrafuertes que al interior sostienen el empuje de dos arcos diafragma; existiendo un tercero que al exterior apoya en el arco de entrad de la plaza.

De la decoración interior no quedan vestigios importantes, y si alguna vez la tuvo, debieron ser decoración de despiece de ladrillo; al igual que en la iglesia Mayor. También debió existir un arrimadero.

Otra parte esencial la constituye la tribuna alta, destinada a las mujeres y que poseía una entrada propia desde el exterior, cegada en la actualidad, con lo que los ámbitos masculino y femenino no se relacionaban.

Por último, no podemos prescindir del magnífico contexto monumental en el que se encontraba la Sinagoga, rodeada de espléndidos de la culta comunidad judía hijarana; sobre los cuales destacaba la "Casa del Rabí", que poseía un acceso directo a la Sinagoga.

No hay comentarios:

Publicar un comentario